Aprende como y porqué congelar tus limones
¿Por qué deberías congelar limones? ¿Hay algo especial sobre los limones congelados? Definitivamente, ¡averigualo aquí!
Los beneficios para la salud del limón incluyen el tratamiento de indigestión, estreñimiento, problemas dentales, infecciones de garganta, fiebre, hemorragia interna, reumatismo, quemaduras, obesidad, trastornos respiratorios, cólera y presión arterial alta, mientras que también beneficia el cabello y la piel. Conocidos por sus propiedades terapéuticas desde generaciones, los limones ayudan a fortalecer su sistema inmunológico, a limpiar su estómago y a considerarse un purificador de sangre.
El jugo de limón, especialmente, tiene varios beneficios de salud asociados con él. Es bien conocido como un tratamiento útil para los cálculos renales, la reducción de los accidentes cerebrovasculares y la disminución de la temperatura corporal. Como refrescante bebida, la limonada te ayuda a mantenerte calmado y fresco.
Pero, ¿por qué deberías comerlo?
Si no lo sabe, la cáscara de limón (piel) sorprendentemente más (5 a 10 veces) nutritiva que su pulpa. Hay muchas formas de comer el peeling rallado, puede rociarlo en casi cualquier alimento y recibir los beneficios para la salud.
Una ventaja más de los limones congelados es que puede obtenerlos durante todo el año, puede comprarlos a granel y congelarlos y disfrutar de sus beneficios incluso después de que la temporada de cosecha haya terminado.
Otros beneficios
Se sabe que los limones y otras frutas cítricas tienen propiedades que ayudan a combatir el cáncer. Hay informes que demuestran que los limones pueden ayudar a combatir tumores y quistes.
Esta fruta tropical también tiene propiedades antibacterianas y consumirla regularmente regula la presión arterial alta, es un hecho conocido que el limón ayuda a la depresión.
¿Qué tipo de limones son mejores para congelar?
Cuando eliges limones para congelar, asegúrate de elegir los más grandes, también busca los que tengan la menor cantidad de puntos blandos o ninguno.
Puede congelar los limones como un todo, cortar, rebanar o en cualquier otra forma. Sin embargo, antes de ponerlos en el congelador, asegúrese de lavarlos bien.
Si prefiere congelar el limón como un todo, póngalo en una bolsa de congelador y retire la mayor cantidad de aire posible de la bolsa.
Para congelar los limones rallados, cúbralos con papel de aluminio para asegurarse de que no se sequen. Coloque los limones envueltos en bolsas limpias del congelador, pero antes de congelarlos, elimine el aire.
Cómo usarlo
Una vez que el limón esté congelado, puedes rallarlo y espolvorearlo en tu cóctel, helado, ensalada, sopa, fideos o lo que quieras. También notará que también tendrá un sabor ligeramente diferente de lo habitual.